El presidente ejecutivo de Naturgy, Francisco Reynés, presidió la Junta General Ordinaria de Accionistas de la compañía, que tuvo lugar hoy en Madrid y que se celebró de manera completamente telemática como consecuencia de las restricciones de movilidad y para preservar las condiciones de seguridad debido al Covid19. Los accionistas aprobaron los resultados y el informe de gestión de la compañía, correspondiente al ejercicio 2020, así como un dividendo complementario de 0,63 €/acción que se abonará el próximo 17 de marzo.
“Ha sido un año complejo, con un entorno macro y energético muy desafiante, que hemos superado gracias a una gestión activa de nuestras actividades y una apuesta clara por la optimización financiera y operativa. Naturgy continúa trabajando en sus pilares estratégicos, con una gestión muy dinámica y con el objetivo de ser un actor clave en la transición energética, así como en la recuperación económica del país”, señaló el presidente de Naturgy, Francisco Reynés.
Naturgy ha demostrado en el último año ser un agente activo en la transición energética. Prueba de ello, ha sido su papel en la presentación de las llamadas call of interest para identificar proyectos tractores de la recuperación económica en el marco de los fondos europeos destinados a la transición energética. La compañía ha identificado oportunidades de inversión por valor de casi 14.000 millones de euros a través de un centenar de proyectos propios a desarrollar en los próximos años en el marco del programa Next Generation.
En este sentido, Naturgy lidera el impulso de proyectos de hidrógeno en España, con cuatro proyectos en desarrollo focalizados en apoyar la transición justa entre los que destacan los de La Robla, en León, y Meirama, en A Coruña, de 30 MW y 50 MW, respectivamente. La compañía busca así el desarrollo de una economía verde, que permita además generar empleo en zonas rurales o de despoblación.
Francisco Reynés señaló que “para abordar de forma realista y efectiva la completa descarbonización de la economía es necesario tanto acelerar la electrificación, invirtiendo en generación renovable y en el desarrollo de las redes de distribución, así como avanzar decididamente hacia una mayor utilización de gases renovables, hidrógeno y biometano, y para ello adaptar las infraestructuras de transporte y distribución”.
En relación a la OPA presentada por IFM Naturgy ratificó que el Consejo de Administración de la compañía se pronunciará “cuando sea oportuno y legalmente preceptivo, y mientras la compañía mantiene el impulso de su actividad diaria y dinamismo en todas sus áreas de actividad”.
La Junta General de Accionistas alcanzó un quórum del 82,4% y casi 1.000 personas se conectaron telemáticamente a la misma.
Compromiso con la transición energética
Naturgy afronta ahora una nueva fase de transformación, tras convertirse en una compañía más sencilla y eficiente, y con una mayor disciplina de asignación de capital. La compañía focalizará sus esfuerzos en el crecimiento en el mercado de las energías renovables y en geografías estables y con divisas fuertes. Naturgy, que hoy opera 4.600 MW de potencia de generación renovable, redoblará su esfuerzo inversor al disponer actualmente de una cartera de más de 300 proyectos que suman más de 13.000 MW en España, Australia, Chile, México y Brasil. Adicionalmente en enero de 2021 acordó la compra de Hamel Renewables, una compañía de desarrollo de proyectos renovables en Estados Unidos, con un porfolio de 8.000 MW en energía solar y cerca de 4.000 MW en almacenamiento.
Destacó también el resultado positivo conseguido en la subasta celebrada en España, donde resultó adjudicatario de un total de 235 MW repartidos entre las tecnologías eólica y solar fotovoltaica. La adjudicación en esta subasta completa la estrategia comercial de Naturgy cuyo objetivo principal es el de acordar contratos de venta de energía renovable a largo plazo (PPAs, por sus siglas en inglés) con clientes industriales.
Durante el pasado ejercicio, Naturgy consiguió importantes avances en Australia, país que se ha convertido en una pieza clave para la compañía ya que, gracias a los últimos acuerdos alcanzados, aumentará su capacidad renovable en este país hasta los 700 MW. En concreto, el grupo cuenta en Australia con los parques eólicos de ‘Ryan Corner’ y ‘Berrybank’, que se sumarán a ‘Crookwell’, actualmente en operación.
“Solo en 2021 la compañía se centrará en desarrollar proyectos renovables por más de 1.000 millones de euros para continuar transformando nuestro negocio hacia un mix energético más sostenible. La compañía no cesará tampoco en la búsqueda de nuevas oportunidades que generen valor para nuestros accionistas”, destacó Reynés.
Por otro lado, además del crecimiento y creación de valor, las líneas de gestión prioritarias del grupo pasan también por mantener la reducción de perfil de riesgo a través de la optimización de su portfolio, donde destaca la desinversión del 96,04% de su participación en la chilena CGE por más de 4.300 millones (EV), confirmando la capacidad de la compañía para generar valor para sus accionistas. La transacción se espera concluya en la primera mitad de este año.
Cabe destacar también el acuerdo alcanzado con ENI y el Gobierno de Egipto en relación al negocio egipcio y cuyo cierre de la transacción se espera para esta semana resolviendo así una situación compleja que se prolonga desde 2012.
Asimismo, la compañía ha mejorado su exposición y compromisos a las compras de gas con el objetivo de reducir tanto el tamaño de estas como su perfil de riesgo. En concreto, se han reducido en un 30% los compromisos de compra, y se han balanceado los índices de referencia.
Consistente con su compromiso de transparencia y con el objetivo de proporcionar una valoración ajustada a las previsiones del escenario energético actual, la compañía llevó a cabo durante el último trimestre una revisión de valoración de determinados activos que se tradujo en un impacto de 1.363 millones de euros, afectando principalmente a la generación convencional en España (1.145 millones de euros) y a las actividades de gas en Argentina (198 millones de euros).
Durante el pasado ejercicio, Naturgy no abandonó su labor social y fue una de las compañías más dinámicas a la hora de poner en marcha una batería de medidas para ayudar a todos sus grupos de interés (empleados, clientes, proveedores y sociedad en general) a aliviar los efectos de la pandemia. Entre estas medidas, destaca el aplazamiento de facturas o el suministro energético gratuito a hoteles y residencias medicalizadas.
Avances ASG
La compañía avanzó de manera significativa en sus objetivos en materia ambiental, social y de buen gobierno corporativo (ASG) durante el ejercicio. Cabe destacar el importante esfuerzo realizado en los últimos años, ya que entre 2017 y 2020 la compañía ya ha reducido un 30% sus emisiones directas de CO2. En concreto, durante el pasado ejercicio, el grupo continuó el descenso de las emisiones de gases de efecto invernadero (-7%) y siguió aumentado la capacidad instalada libre de emisiones (+10%).
En el ejercicio, la compañía sumó 685 millones de euros en inversión y gasto destinado a acciones medioambientales en todo el mundo y activó cerca de 270 iniciativas relacionadas con la biodiversidad, así como actuaciones en hogares vulnerables, a través de su Fundación, que en 2020 superó las 700 rehabilitaciones energéticas en España.
Todas las actuaciones llevadas a cabo por la compañía en los últimos años han permitido a Naturgy estar altamente calificada y ser valorada en distintos índices internacionales que analizan el compromiso medioambiental y social de las empresas. Así, Naturgy obtuvo en 2020 el liderazgo global en el sector Multiutilities por segundo año consecutivo y renovó los primeros puestos en DJSI World y DJSI Europe del sector utilities de gas. Asimismo, según el índice EuroNextVigeo, Naturgy es una de las 120 compañías sostenibles líderes en el mundo, Europa y Eurozona; mientras la compañía se mantiene desde 2011 en posiciones de liderazgo en el CDP A List.